Los cruceros fluviales nos ofrecen un concepto vacacional muy similar al de los cruceros marítimos, aunque de dimensiones más pequeñas debido a que dependen de la navegabilidad del río que recorren. Su medio natural son las aguas de los canales, ríos y de los lagos.
Los cruceros fluviales tienen un diseño, un tamaño y unas medidas que están supeditados a la profundidad del río por el que navegan. Además son más livianos que los cruceros de mar y la cantidad de pasajeros que pueden transportar oscila entre 70 y 300 personas, teniendo un trato más cercano con el personal del barco.
Son una gran opción para conocer el interior de los continentes desde otro punto de vista. Por lo general, los cruceros fluviales navegan por la noche y suelen estar en tierra firme durante el día, con alguna excepción, en la que la belleza del paisaje obligue a navegar durante el día.
A través de los cruceros fluviales podrás tener una percepción de la naturaleza, la historia y la cultura de los pueblos muy diferente. Los barcos se acercan a pequeñas poblaciones ubicadas en las orillas, y las antiguas construcciones ubicadas en las colinas se ven desde una perspectiva muy diferente.
Los cruceros fluviales te permiten conocer las ciudades a través de los ríos que las comunican. Dependiendo del país en el que te encuentres podrás conocer tanto las pequeñas poblaciones de agricultores como las grandes ciudades, desde un punto de vista diferente. Hay paisajes que sólo pueden disfrutarse desde un barco fluvial.
Imagina navegar por el Rin, el Po o el Danubio para conocer la vieja y romántica Europa, o cruzar el Volga y conocer dos ciudades imperiales como Moscú y San Petersburgo, o hacer un crucero por el río Yangtsé, que es el río más largo de Asia, y conocer las abruptas montañas de las Tres Gargantas, por la China milenaria con sus mil contrastes, sin dejarnos atrás el fascinante y cautivador Nilo.
Muchos son los ríos que atraviesan ciudades de un gran interés cultural e histórico: Nilo, Rhin, Danubio, Sena, Volga, Duero, Guadalquivir, …
Existen muchos viajes de circuitos por Europa, por ejemplo, en los que conoces diferentes ciudades, pero una forma cómoda de viajar por Europa sin tener que pensar en hacer y deshacer equipajes es hacer un crucero fluvial. Aprovechando las noches para descansar mientras navegas sin perder tiempo en traslados entre ciudades. Además la mayoría de las escalas se realiza en el centro de las ciudades por lo que se convierte en un punto perfecto para iniciar tu excursión para conocer la ciudad.
En muchos itinerarios las excursiones están incluidas, facilitándote la visita a determinadas atracciones turísticas como museos, etc.
Uno de sus principales atractivos respecto a los cruceros marítimos es su navegabilidad por aguas tranquilas. Sin lugar a dudas, un crucero fluvial es el medio más cómodo de conocer paisajes y gentes, viajando de una forma relajada y cómoda.
Navegarás a bordo de un hotel flotante con todas las comodidades que te transportarán de ciudad en ciudad. Conocerás los paisajes mas bellos del Viejo Continente y China, y disfrutarás de las mejores panorámicas de las principales ciudades por las que podrás pasear y conocer a fondo gracias a las excursiones que se incluyen.
Si te decides por un crucero fluvial para tus próximas vacaciones, serán unas vacaciones únicas e inolvidables. Tienes muchas opciones diferentes para buscar tu viaje perfecto, te ponemos algunos ejemplos:
CENTRO DE EUROPA
Descubre la magia del centro de Europa con un crucero por el Danubio. Las grandes ciudades centroeuropeas se irán presentando ante tus ojos a ritmo de Vals, la Viena Imperial, la magia de Budapest, el encanto de Bratislava o Belgrado entre otras muchas.
SUIZA, ALEMANIA Y PAISES BAJOS
La ocasión perfecta para conocer Estrasburgo, Amsterdam, Basilea o Colonia, entre otras ciudades, es a través de un romántico crucero por el Rhin.
RUSIA
Podrás descubrir lo mejor de Rusia a través de un crucero por el Volga. Descubrir Moscú, San Petersburgo y las grandes ciudades rusas o sus pueblos pintorescos.
FRANCIA
Conoce la esencia más mediterránea de Francia gracias a un crucero por el Ródano. Visita Lyon, Avignon, Arles o Marsella y deléitate con sus románticos paisajes.
CHINA
Conocer Shanghai, las Tres Gargantas y Pekín a través de un crucero por el Yangtzé en un espléndido viaje que te llevará hasta el corazón de China.